En contra de lo que pudiera parecer, una gran parte de la población no tiene nada claro cuál es la función empresarial de las corredurías de seguros, más allá de tramitar el seguro obligatorio del coche. Sin embargo, la realidad es bien distinta.
Las ventajas de contratar un seguro a través de una correduría.
Antes de profundizar en el sector, conviene aclarar que por seguros viene a entenderse un producto financiero que garantiza una contraprestación o servicio determinado de darse tal o cual eventualidad. Es decir, una especie de salvavidas económico.
La variedad de productos que ofrecen las corredurías suele confundir a la gente, pero, en el fondo, la razón de ser de todos ellos es más o menos la misma. A continuación, expondremos algunos ejemplos de los diferentes tipos de seguros existentes para particulares.
Los más habituales son los seguros de salud o de vida. A grandes rasgos, los primeros garantizan la asistencia médica en centros privados en caso de ser necesaria, y los segundos una aportación al beneficiario en caso de que el asegurado pierda la vida.
Como decíamos, el funcionamiento es siempre el mismo: se acuerda pagar una cantidad periódicamente o de una vez para contar con la garantía de pago si pasa algo (que debe delimitarse en el contrato).
Otro producto destacable por su enorme potencial son los seguros de viaje. De nuevo, consisten en un blindaje frente a posibles imprevistos en unas vacaciones o viaje de negocios. Por ejemplo, garantizan asistencia médica incluso en los países más pobres del globo.
Como has podido ver, el potencial de las corredurías de seguros va mucho más allá de ofrecer el seguro de coche obligatorio. Protegerse frente a los distintos contratiempos que pueden surgir a lo largo de la vida es más que recomendable, y los seguros son el mejor medio.
